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El muro que separa el enclave español Ceuta de Marruecos ha sido durante mucho tiempo un emblema de Fortress Europe, construido para disuadir a los migrantes del norte de África. Esta semana, sin embargo, miles de personas llegaron a la frontera en un intento sin precedentes.
El Ministerio del Interior de España ha anunciado que está reforzando su contingente policial en Ceuta, junto con soldados. Los soldados trabajarán con la policía en lugares sensibles dentro del enclave para mantener el orden en las calles.
La pared debe levantarse para evitar intentos
Los enclaves españoles de Ceuta y Melilla en la costa norte de Marruecos han sido durante mucho tiempo un imán para los migrantes africanos que intentan llegar a Europa.
La cerca fronteriza que separa a España de Marruecos se ha incrementado con cuchillas adicionales para dificultar que las personas salten. Pero esta semana, 116 migrantes saltaron la cerca y llegaron a España.
Ha causado una crisis diplomática y una emergencia para España. También es un dolor de cabeza político para el gobierno socialista del país, que ha estado lidiando con picos en las llegadas de migrantes.
Vox, el partido de extrema derecha que ingresó al Parlamento el año pasado y ha expresado sobre la inmigración, quiere levantar el muro.
El muro se encuentra en la frontera de Ceuta, una ciudad portuaria en España que es reclamada por Marruecos y forma parte de la única frontera terrestre de la Unión Europea con África. La barrera es parte de los esfuerzos de la UE para evitar que el contrabando de migrantes en Europa.
Debe levantarse para evitar la muerte
El enclave español de Ceuta, junto con la cercana Melilla en la costa norte de Marruecos, ha sido considerado durante mucho tiempo como una puerta de entrada a Europa para los migrantes africanos. Cientos de lesiones o la muerte cada año saltan sobre las cercas, escondiéndose dentro de los vehículos o nadando alrededor de las batallas que se extienden al mar Mediterráneo.
Vox, la fiesta de extrema derecha de España, pidió levantar un muro en la frontera de Ceuta para evitar intentos de migrantes irregulares para ingresar al territorio español desde Marruecos. Una cerca doble de 10 metros (32 pies) rodea la frontera suroeste de 8 km (5 millas) con Marruecos, pero la gente ha logrado nadar a través de ella.
Al menos 3.000 migrantes irregulares nadaron en Ceuta el lunes y martes, dijeron las autoridades españolas. La mayoría de ellos ingresaron al enclave del sur de la playa de Tarajal y un grupo más pequeño ingresó al norte de Ceuta en Benzu Beach, según CNN.
Debe levantarse para evitar lesiones
España ha desplegado tropas en su enclave de África del Norte de Ceuta para patrullar la frontera con Marruecos después de que miles de migrantes, muchos de África subsahariana, ingresaron a la ciudad el lunes y martes nadando o subiendo sobre la cerca. Una fuente del gobierno dijo que los soldados trabajarán con la policía en lugares sensibles dentro del enclave para mantener el orden en las calles.
El primer ministro Pedro Sánchez calificó la afluencia masiva de migrantes «una crisis grave para Europa» y prometió restablecer el orden de inmediato en el territorio español, que limita con la costa norte de Marruecos. También dijo que visitaría las ciudades de Melilla y Ceuta, que se encuentran más al este.
En un video compartido por un sindicato de policía español, los oficiales antidisturbios detrás de la valla fronteriza estaban usando escudos para protegerse de las piedras lanzadas por personas en Marruecos. Varios vehículos blindados estuvieron estacionados el martes en la playa de Tarajal, donde la cerca fronteriza conduce a un breve rompeolas que encadena en el mar.
Debe levantarse para evitar intentos
Un periódico español y un sitio web político llamado VOX el sábado solicitó que el gobierno del país levantara un muro en la frontera de Ceuta para evitar intentos de los migrantes africanos de violarlo. El muro es una barrera importante para aquellos que intentan ingresar a España, una de las únicas fronteras terrestres de Europa con África.
El muro es un accesorio permanente en el enclave, un pequeño país en el extremo noroeste de Marruecos que ha sido un destino clave para los migrantes subsaharianos desde su creación en el siglo XVI. Está reforzado con rocas y concreto.
Sin embargo, varias personas han logrado romper el muro y nadar en Ceuta en los últimos años. En 2016, un reportero de Reuters en la costa cerca de la frontera dijo que cientos de personas intentaban nadar en el enclave.
El principal funcionario de migración de la Unión Europea, Ylva Johansson, describió los cruces como «preocupantes» y pidió a Marruecos que evite que las personas se establecieran en primer lugar. También dijo que las autoridades español deben hacer más para evitar que aquellos que ya han llegado al país se van.